miércoles, 23 de septiembre de 2015

EL CULTIVADOR DE TABACO: SU AZAROSA VIDA



EL CULTIVADOR DE TABACO: SU AZAROSA VIDA
Por Teodora Infante Hernández

  Voy a contar la vida triste  y alegre de un tabaquero, es decir, de una persona que se dedica al cultivo del tabaco.
  Su tarea comienza a últimos de febrero, cuando empieza a preparar sus “semilleros”, ya que por estos días le llega la semilla de manos de la Compañía de Tabaco con laque tenga su contrato de cosecha.
  Con este trabajo ya empieza su preocupación. Se esmera en poner el semillero en sitio un poco resguardado de los vientos, ya que si vienen fuertes se lo pueden dañar.
  El tabaquero comienza depositando las semillas en unas bandejas que ha rellenado de mantillo, y con una máquina especial deposita cada grano de semilla en un departamento de los 250que tiene cada bandeja. Así hasta completar un número más alto de plantas de las que tiene concedidas por si alguno de los semilleros fallara.
  Deposita las bandejas en una balsa llena de agua que va vigilando para que no las falte nunca agua suficiente. Así las vigila hasta que en mayo se trasplantan en la tierra. Con este trabajo empieza la preocupación: si nacerá bien, si le puede afectar algún hongo, si en verano hará buena temperatura dado que si es demasiado fresca puede llenarse la planta de virosis, si habrá agua suficiente para regar o será un verano seco porque no llueva en la primavera y los manantiales no estén suficientemente surtidos.
  A primeros de marzo empieza a labrar las tierras, a repartir el estiércol, a mirar al cielo no vaya a llover y no pueda entrar a labrar la tierra y ponerla a punto para la “postura”, esto es, el trasplante del semillero a la tierra, planta a planta.
  Con el mes de mayo llega la postura para la que ha habido que poner las máquinas a punto, para que cuando se empiece a trasplantar no haya problemas y todo esté preparado y no se pierda tiempo.
  El tabaquero siempre está pendiente del cielo. Así si empezó la postura y llueve demasiado tiene que parar porque la tierra pierde las buenas condiciones, o por el contario, si no llueve la tierra estará demasiado seca y las plantas se podrán “acostanar”, es un dicho de esta tierra, o sea, secarse por medio. En este caso hay que echar mano de los motores de riego, montar tuberías y aspersores de riego, y ¡a regar se ha dicho! Todo este montaje supone un montón de trabajo y de dinero a su vez.
  Una vez puesto el tabaco hay que estar pendiente de la “rosquilla” porque si no las matas te dejan la plantación en cuadro, y son pérdidas y trabajo al perdido.
  El tabaquero empieza el día mirando el trabajo que hizo ayer, comprobando si va bien, y así un día y otro, si caerán cuatro chispas de lluvia que a las plantas las viene bien pero a la hierba mejor, porque si no ha curado antes para que no nazca, empieza a salir y crece más que el tabaco. Para que la cura haga efecto la tierra debe tener un grado de humedad adecuado, dado que si tiene mucha humedad no pueda curarse y si tiene poca no hace efecto.
  Dependiendo de cómo venga el tiempo, a mediados de junio si la tierra está muy seca, se comienza a regar, y entre el agua que la planta absorbe por la raíz, y el sol que recibe por las hojas, la planta crece y el tabaquero goza de su trabajo. Esto ya le va animando, y de vez en cuando, subido en su tractor, se echa un cantar, mientras va mimando sus plantas, y su mujer andando detrás destapa alguna planta que se haya podido tapar.
  Por esta época del verano la familia tabaquera empieza a echar cuentas y a ilusionarse viendo como su trabajo presenta buenas perspectivas.
  Como ya es tiempo de calor y hay que limpiar las plantaciones de hierbas toda la familia, ¡padres, hijos e incluso en algunos casos los abuelos!, madrugan para pasar el menos calor posible y aprovechan la fresca, recogiéndose a descansar cuando viene el calor. Comen, se echan la siesta y por la tarde los jóvenes descansan, mientras los padres riegan o hacen alguna actividad en la finca. Y así todos los días mientras haya hierbas que quitar.
  Cuando llega julio se empiezan a ver las primeras flores de la planta, debiendo esperar el tabaquero a que la mayor parte de la plantación esté florecida para comenzar a “descogollar”, esto es, cortar las flores a las plantas consiguiendo así que las hojas se rehagan y comiencen a madurar, de modo que cuando las primeras hojas de abajo de la planta están amarillas es señal de que están maduras, y se pueden empezar a recoger.
  Se sigue regando y se ponen las máquinas a punto para el “repele” o recolección, se repasa el secadero de horno, y cuando todo está listo se empieza el “repele”. El tabaquero lleva la máquina surco a surco, quitando de cada planta cuatro o cinco hojas, mientras otros esperan en los contenedores que van a llevar el tabaco al horno para colocar bien la hojas que la máquina descarga sobre los mismos; y así hasta completar el horno.
  Una vez lleno el horno se pone en funcionamiento vigilando el aire, la humedad, la temperatura y el calor; así hasta ocho o diez días que tarda en secar la hornada. Cuando el tabaco está seco se le da humedad, se lo clasifica, se empaqueta y se almacena hasta que abren el “Centro” de recogida.
  El día que le toca entregar en el Centro, el tabaquero carga su remolque con el número de fardos que le han sido asignados, y muy de madrugada va a entregar su partida; y a que le den el “desayuno”, el cual será bueno si sus fardos han obtenido buena clasificación, y malo si no la han obtenido. Y así hasta que termina la temporada.
  Con este tiempo de entrega el tabaquero va echando sus cuentas, que pocas veces le cuadran, pero es su medio de vida y tiene que seguir adelante pidiendo que el año que viene sea mejor, y pensando en sembrar otra vez el semillero.
  Y esta es la vida de un tabaquero.
NOTA: La autora de tan bonito artículo promete que ampliará la historia de las personas cultivadoras de la aromática planta del tabaco, que viven a la bajada de Gredos.

jueves, 10 de septiembre de 2015

FIESTAS DE CANDELEDA 2015



FIESTAS DE CANDELEDA-2015

  La fecha del 8 de setiembre es señalada en muchas partes de España como el día de la Natividad de Nuestra Señora.
  Pero en Candeleda, con una singularidad muy especial, se celebran las Fiestas, en honor de su propia Patrona: Nuestra Señora de Chilla.
  Esta festividad no tiene nada que ver con la del día 8 de setiembre. Es una fiesta propia, y se conmemora en ella la aparición de la Santísima Virgen el año 1300, concretamente en el bellísimo paraje de Chilla. De aquí el nombre de dicha advocación de la Virgen María.
  Se aprovecha tan señalada fecha para celebrar las famosas y reconocidas “Fiestas de Candeleda”. Y siempre, desde fecha inmemorial, se celebra el segundo domingo del mes de setiembre, caiga el día que caiga.
  Este año la Virgen de Chilla cae el día 13 de setiembre, domingo claro. Y ese día candeledanos y no candeledanos venidos de todos los rincones del planeta Tierra, estarán presentes en la hermosa explanada de Chilla, disfrutando de su fantástica arboleda y de sus fuentes cantarinas de agua pura.
  Pero también del hermoso monasterio que ha resultado de la transformación muy acertada del Santuario de Chilla, con sus alrededores de jardines y bancos de recreo para el disfrute de los visitantes,
  Y cómo no, de asistir a la ceremonia religiosa con la Hermosa Señora de Gredos.
  Y luego alegrar el oído con las jotas serranas, que con voz recia pero melodiosa se extienden por las agrestes laderas de Gredos:

Hermosa Virgen de Chilla
vente conmigo a vivir,
mientras que los albañiles
arreglan tu Camarín,
arreglan tu Camarín.

Vive una candeledana,
a la bajada de Gredos
vive una candeledana,
si quieres saber su nombre
Virgen de Chilla se llama.

Y allá va la despedida,
no sos la quisiera echar,
me voy a ver a la Virgen
y me tengo que marchar,
y ahora sí que va, que va.

martes, 8 de septiembre de 2015

8 DE SETIEMBRE- DÍA DE GUADALUPE



DÍA DE EXTREMADURA-2015

  La fecha del 8 de setiembre es señalada en muchas partes de España: es el día de la Natividad de Nuestra Señora.
  Tal arraigo en Extremadura se remonta a fechas lejanas. Pero a su vez los extremeños celebran la bella festividad de la Virgen de Guadalupe.
  El grandioso monasterio de tan bonita localidad aparecerá adornado, luciendo sus mejores galas. En la gran plaza se concentrará un enorme gentío de todo el mundo. Recordemos que la Virgen de Guadalupe es la Patrona de la Hispanidad, es decir, de toda Iberoamérica, Filipinas, etc., etc.
  Pero en Extremadura también celebramos el día de la Comunidad Extremeña. Es nuestra gran fiesta civil. Y mejor que peor, vamos recorriendo nuestra singladura a través de los años, con nuestros desvelos y trabajos, con nuestras alegrías y tristezas. Creo que la Virgen, desde su alto trono, vela por los extremeños, aunque algunas veces no nos demos cuenta; mejor decir que no nos queremos dar cuenta.

La Virgen de Guadalupe
es un poquito morena,
y el niño que lleva en brazos
todo se parece a ella.

Morena la quiero yo,
morena desde que supe,
que morenita es también,
la Virgen de Guadalupe.